Las muelas del juicio son las últimas piezas dentales que aparecen, ya en la edad adulta. Esto ha hecho que se hayan creado mitos y creencias falsas en torno a ellas. Pero te vamos a contar cinco verdades en torno a las muelas del juicio, para que lo tengas claro.

Se trata de cuatro molares, ubicados en la zona posterior de cada arco dentario. Son los últimos en aparecer, en torno a los 15-25 años.

Resultan una prueba de la evolución de la especie humana, vestigios de los terceros molares que nuestros ancestros utilizaban para masticar. Hoy ya no son necesarias y no tienen ninguna función transcendente.

Uno de los primeros mitos en torno a las muelas del juicio dice que su nombre se debe al dolor que provocan. Pero es un falso mito; en realidad, se las denomina muelas del juicio porque son las últimas en salir y lo hacen en la edad adulta, simbolizando la de mayor juicio, la de la madurez, responsabilidad, la edad adulta.

El hecho de que sean las últimas en aparecer no tiene porqué suponer que no van a poder hacerlo con normalidad. De hecho, sólo una pequeña parte de la población es la que no tiene el espacio en su mandíbula que la muela necesita para salir. Por lo tanto, las muelas del juicio pueden salir con normalidad en la mayoría de los casos.

Pueden darse tres casos en lo que respecta a las muelas del juicio:

1. Que no aparezcan nunca, porque queden dentro del hueso maxilar y no salgan.
2. Que haya espacio suficiente en la mandíbula y salgan normalmente.
3. Que estén bloqueadas y sin espacio en el hueso maxilar y no puedan salir o tengan mala posición. Será en este caso cuando resulte necesario extraerlas.

Otro de los mitos falsos sobre este tema afirma que las muelas del juicio empujan al resto al salir y hacen que todos los dientes se muevan. Esto es falso.
Lo cierto es que pueden hacer presión sobre las muelas que están justo delante, pero esto no significa que vayan a modificar la posición de todas las piezas.

Esto sí suele ser cierto, pero tampoco tiene porqué ser siempre así.
Cuando empiezan a salir pero se quedan bloqueadas la zona se inflama y se puede infectar provocando:

• Dolores en la mandíbula y la cara.
• Inflamación.
• Molestias al masticar.
• Dolores de cabeza

Esta es otra de las falsas creencias en torno a las muelas del juicio.

Debemos aclarar que no es necesario extraerlas siempre. Se quitan cuando no tienen espacio suficiente para salir normalmente o adoptan una posición anómala debido a la falta de espacio.

Cuando resulte necesario realizar una operación quirúrgica para extraer las muelas del juicio, ésta se realiza en consulta, con anestesia local. Se pueden sacar las dos de un lado (superior e inferior) en la misma operación, o incluso las cuatro de una vez, aunque recomendamos hacerlo escalonadamente.
Respecto al proceso post-operatorio, conlleva molestias leves que se pueden tratar con la aplicación de frío y analgésicos y manteniendo una dieta blanda los primeros días.